miércoles, noviembre 12, 2008

El juguete nuevo

"Así funciona, tú lo quisiste, ahora acéptalo". Le había dicho el vendedor cuando quiso devolver el juguete que compró el mes pasado. En un principio le había encantado, era tan distinto, tan diferente a los otros jugetes que tenía, él era especialmente triste, él la necesitaba. Por primera vez se sintió responsable de las risas de este juguete, era de plástico, pero reía con las amabilidades de ella. 
Cuando recien lo compró pasaba horas intentandolo hacer felíz, y eso le encantaba, fascinaba perder su tiempo en hacer feliz algo material, algo que no podía ser feliz, pero ella no lo entendía así, ella creía que los demás no veian al igual que ella, creía que los demás se habian perdido ese hermoso juguete, y que sólo ella sería capaz de mejorar los días de este plástico. Lástima que la niña, tarde se dio cuenta que la felicidad del juguete estaba en otros como él, no en una persona como ella, que reía, que era feliz con sus amigas.
El juguete le mostró otro camino, le dijo que ya o neceistaba las cosas superfluas del mundo de los de carne y hueso, que la verdadera alegría estaba en no reir, en estar sólo y disfrutar de como los demás buscaban ser de plástico para no sentir, lamentablemente siempre se siente, aunque por fuera seas solo de plástico.
La niña dedicó horas, días y semanas enteras a su cuidado, ya no le interesaba ser como era antes de tenerlo, creía que sólo si fuese de plástico sería felíz junto a él. Y poco a poco se fue obsecionando con el juguete, él no tenía autoestima, y ella se creía responsable de crearsela... Él ya no disfrutaba de las puestas de sol, tirados en una plaza, ella creía que solamente ella seria responsable de volver a encantarlo con las cosas pequeñas de la vida. Y así fue como necesitó ser igual a él, para hacerlo reflexionar... Poco a poco, fue perdiendo sus caracteristicas humanas, y fue tejiendo una aurora plática a su alrededor, que ya no la dejaba respirar; dejó de lado las emociones humanas para sólo sentarse en las que poseian los juguetes de plástico. 
Ella lo quería, lo amaba, era su único y verdadero amigo, porque segun ella, era el único que la entendía, mas tarde se dio cuenta que él no necesitaba una humana disfrazada de juguete, él necesitaba un juguete para hacer felíz, para dedicarle días enteros.
Cuando se dio cuenta que ya no le afectaba lo que pasaba en el mundo, el mundo en el que perteneció alguna vez, cuando se dio cuenta que ya no podía llorar porque al plástico no le salen lágrimas, se dio cuenta de que ya no queria ése juguete, porque intentando darle toda la felicidad del mundo, ella la perdió. Intentando que él riera, ella dejo de reir, intentando que el formara parte de algo, ella dejo de formar parte de lo que era.

1 comentario:

Gonzalo dijo...

Sabes que me encanta como escribes (: y tambien sabes que lo haces bien y que nunca me mandaste el cuento 88 xd te adoro eliana :B